Nosotros en la luna es el último libro de Alice Kellen publicado hasta la fecha. Tras su bilogía Deja que ocurra, tenía muchas ganas de volver a leer algo nuevo de la autora, sobre todo esta nueva historia de la que ya había dado algún atisbo por redes mientras la escribía. Y os puedo decir muy rotundamente que ha sido la mejor novela que he leído de Alice Kellen. Así, tal cual, sin animo de desvalorar ni mucho menos otros de sus títulos que también me han encantado; solo que Rhys y Ginger han tenido algo especial. Llamémosle magia.
Su historia empieza en París de la forma más imprevista y también preciosa. Coinciden ambos allí una noche, recorren la ciudad, conociéndose, y, desde ese momento, siguen en contacto durante años, sin dejar de rememorar ese momento tan único e importante en sus vidas. Su relación irá creciendo poco a poco, de una manera muy al estilo de Alice Kellen: dulce, bonita, delicada pero profunda y compleja. No todo es fácil, dicho y hecho. Cada uno tiene una vida muy diferente a la del otro. Responsabilidades, sueños y aspiraciones que no pueden dejar atrás y olvidar como si nada. Desde esa noche en París tan especial, pasan años, muchos correos electrónicos, alguna llamada y pocas visitas in situ. Es decir, decisiones drásticas, difíciles de tomar y resoluciones dolorosas en la mayoría de los casos.
Rhys y Ginger son increíbles, empezando por la banalidad de sus nombres (detalle importante para mí como lectora, banal o no) y acabando por su complejidad. Tengo que destacar el personaje de Ginger, porque la considero la luz de la historia en muchos sentidos, siéndolo sobre todo para Rhys, que la necesita, aunque no lo sepa, para salir de su burbuja personal. Y, en definitiva, ha sido una lectura que me ha hecho emocionarme, me ha hecho sentir y empatizar con ambos personajes. La forma de escribir de Alice Kellen es, ante todo, muy inteligente. Lo demuestra siempre y en esta ocasión, ha acertado por completo.
Sinopsis: Cuando Rhys y Ginger se conocen en las calles de la ciudad de la luz, no imaginan que sus vidas se unirán para siempre, a pesar de la distancia y de que no puedan ser más diferentes. Ella vive en Londres y a veces se siente tan perdida que se ha olvidado hasta de sus propios sueños. Él es incapaz de quedarse quieto en ningún lugar y cree saber quién es. Y cada noche su amistad crece entre emails llenos de confidencias, dudas e inquietudes. Pero ¿qué ocurre cuando el paso del tiempo pone a prueba su relación? ¿Es posible colgarse de la luna junto a otra persona sin poner en riesgo el corazón?
Una historia sobre el amor, el destino y la búsqueda de uno mismo.